Pretendía la buena señora, una entrevista por teléfono, en la que debía responder a un cuestionario estúpido, para un articulo de un periódico de tirada nacional. Debía salir dicho articulo al día siguiente y según la periodista, debería demostrar, si existía la homosexualidad descubierta o reconocida después de los 50 años. No deseo por respeto a este colectivo de personas, describir el contenido de la conversación, pero si os contaré que le hice un ruego a la «reportera dicharachera» y fue que, desde mi personal opinión, debería tener un poco mas de empatía con estas personas y bastante menos soberbia.
Si querida periodista… Si… Existe un colectivo que «salió del armario» después de los 50 años. Un colectivo de hombres y de mujeres que han sufrido y aún sufren víctimas de sus propias realidades. Fueron considerados delincuentes, degenerados y enfermos hasta la década de los 80 y hoy todavía tienen difícil aceptación en algunos círculos. Aún podemos escuchar «chistes de mariquitas» y descubrir miradas de desaprobación en algunos espacios sociales. Estos protagonistas de tu reportaje señora periodista, optaron la mayoría, por la invisibilidad en su juventud. Fue una generación de tristes hombres y mujeres escondidos en sus propias mentiras a las que alimentó el miedo. Sermones en púlpitos advertían sobre el pecado por ir «contra natura«, risas y burlas sobre el diferente, exclusión familiar y social… Emociones en definitiva, que fueron caldo de cultivo para que sentimientos de culpa afloraran en las personas homosexuales.
sonas como Ud. no presupongan, juzguen, osen, se atrevan y nos marquen «la hoja de ruta» sobre como «abandonar nuestro armario.«







