COMUNICADO 24 DE JUNIO
Día de la Diversidad Religiosa y Espiritual.
Tal día como hoy, en 2013, el Consejo de Asuntos Exteriores de la UE adoptó dos líneas directrices: una, para la «promoción y protección de la libertad de religión y creencias» y otra para la «promoción y protección del disfrute de todos los derechos humanos por las personas lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersex (LGTBI)>>. Este año nos complace presentar nuestra primera campaña con motivo del 24 de junio, que desde FELGTB hemos designado como el “día de la Diversidad Religiosa y Espiritual” de nuestro colectivo.
En este día las personas creyentes y espiritualesLGTBI queremos mostrarnos orgullosas de nuestra doble realidad como miembros del colectivo LGTBI y como personas que viven una realidad espiritual, sea a través de una religión o no. Y nos sentimos parte de la riqueza y la diversidad que aportan los colores de cada una de nuestras letras.
Creemos que la dimensión espiritual es un ámbito del ser humano que lo define y lo guía en su manera de entender la vida y de vivir su propia existencia. Esta dimensión puede tomar la forma religiosa pero también de creencias laicas que se unen a propósitos éticos.
Esta forma de sentir y pensar, junto con comportamientos y acciones, consolida y llevan adelante la unidad esencial del individuo.
Somos conscientes de los mensajes LGTBIfóbicos que emiten muchas instituciones religiosas y, en concreto, en nuestro país, parte de la jerarquía de la Iglesia Católica. Este tipo de declaraciones dañan y fomentan la discriminación, el odio y la violencia hacia las personas LGTBI, lo cual contradice totalmente el mensaje de Amor que promulgan las religiones y las diversas espiritualidades.
Categoría: Derechos LGTB
La Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales considera que este documento daña la integridad de las personas LGTBI. Desde un punto de vista absolutamente tránsfobo, el documento carga contra lo que la Iglesia Católica reitera en llamar “ideología de género”, que es sencillamente tumbar las reivindicaciones de las personas trans y la libertad de vivir la propia identidad. El ala más ultraconservadora de la jerarquía de la Iglesia Católica vuelve a hacer gala de su transfobia, y la extiende además a las familias y a personas homosexuales y bisexuales.
El citado documento, que la Iglesia Católica considera “metodológico”, trata de “advertir del peligro” que supone hablar de identidades y diversidad LGTBI. Sus autores siguen incidiendo en rumores y mitos lejanos a la ciencia, en los que se reduce la sexualidad a lo meramente genital. La Institución sigue sin asumir los avances científicos y sociales en materia de diversidad y de identidad de género.
Toledo, 26 de mayo de 2019
Las personas creyentes LGTBI reunidas tal día como hoy en los VI Encuentros Estatales de Fe y Espiritualidad organizados por la FELGTB concluyen:
1.- Las personas mayores necesitan Amor. Y como creyentes LGTBI haremos lo posible por dárselo;
2.- Necesitamos ser conscientes de las amenazas a nuestro futuro y hacernos responsables de enfrentarlas;
3.- Debemos superar el victimismo y ser conscientes de nuestra dignidad y responsables de nuestra vida;
4.- Nuestras personas mayores son punta de lanza. Hay que hacerles visibles y devolverles lo que nos han dado. Tenemos una deuda de gratitud y una responsabilidad de seguir trabajando con y por ellas.
5.- Aún hay mucho por hacer. A pesar de haber conseguido derechos, no lo tenemos todo.
6.- Redoblar el esfuerzo y la lucha puesto que todavía existen muchas amenazas.
Y, a raíz de estas conclusiones, manifiestan:
1.- Nuestro enorme agradecimiento a todas las personas LGTBI que nos precedieron, especialmente a las creyentes LGTBI, por su lucha y carisma. Gracias a ellas disponemos de una serie de derechos y libertades que nos fueron negadas incluso al inicio de la democracia en nuestro país. Somos conscientes del sufrimiento por el que han pasado. Queremos homenajear a nuestras personas mayores LGTBI por su ejemplo, enseñanzas y experiencia y agradecer a las que se encuentran en nuestros colectivos y comunidades su historia y su lucha por un mundo más justo y diverso.
Este articulo es el segundo de una serie sobre la memoria y evolución del movimiento LGTB+ en nuestro país.
Podría decirse que la temática sexual ayudó a destapar “vergüenzas privadas” de la sociedad española a finales de los setenta. El sexo como acicate de la cultura de esos años en España fue notable; sobre todo, para soltar la rienda a actitudes no normativas que definían al colectivo LGTB+.
España venía de una dictadura, lo que indica vagamente que las leyes en nuestro país, como en cualquier otro que se inicia en el proceso de transición, suele tardar más en adaptar el marco jurídico al marco social que la propia sociedad a su nueva cotidianeidad. Por ello, las ansias de cambio de mentalidad por parte del colectivo en España trajeron como consecuencia reivindicaciones sociales memorables.
Con Franco en sepultura y con el entonces sustituto de Franco, Arias Navarro, quien hacía oídos sordos a la derogación de la Ley de Peligrosidad y Rehabilitación Social (LPRS) (expuesta en el artículo anterior), encontramos, pese a todo, a una poderosa organización del Front d’Alliberament Gai de Catalunya (FAGC) dispuesta a hacer cambios históricos en España. Tenía como objetivo establecer la tan ansiada igualdad social para el colectivo LGTB+ que lucía por su ausencia más años de los que hacía que el pueblo vándalo había puesto un pie en la Península Ibérica allá por el siglo V d.C.
Comienzo de la simbología del colectivo
Madrid, 10 de enero de 2019. Un día después de la firma del “Pacto de la Vergüenza”, suscrito por el Partido Popular y el partido de la extrema derecha neofranquista, con la complacencia de Ciudadanos en Andalucía, COGAM quiere condenar los puntos suscrito por estas fuerzas políticas que atentan contra los derechos más básicos de las personas.
A este respecto, el simple hecho de sentarse en una mesa de negociación con un “partido” que pone en cuestión todos los consensos democráticos en materia de igualdad y diversidad es un disparate por sí sólo. Sentarse con ellos supone dar alas a su discurso de odio contra mujeres, migrantes, personas LGTBI y todo aquel que consideran fuera de la “norma”.
A este respecto, todos los partidos y gobiernos que suscriban acuerdos con este tipo de “formaciones” van a encontrar en contra al movimiento LGTBI y a COGAM.